He visto

Siempre me ha gustado observar lo que hay a mi alrededor. Me gusta admirar lo que mis ojos pueden ver. A veces quisiera poder grabar en papel lo que ellos ven. La cámara fotográfica ayuda, pero no puede capturar todo el sentimiento que hay detrás de cada imagen que observo. La lente de la cámara es insuficiente ante las lentes de mis ojos.

He visto el amanecer posarse en la montaña, y a la gente del campo prepararse para la jornada laboral.

He visto las maravillas de la naturaleza y los enormes árboles que adornan los bosques de este país.

He visto el salado mar una infinidad de veces, y al Sol esconderse en su espumeante brisa.

He visto a las estrellas, relucientes y parpadeantes, escondidas en alguna parte del Universo.

He visto gente nacer y a sus madres llorar de felicidad.

He visto a mi padre besar a mi madres, y a ella aceptar sus besos.

He visto a mi hermana cumplir sus sueños, y hacer lo que más le gusta.

He visto la inocencia en los niños, y su alegría deslumbrar su fina cara.

He visto muchas películas, y he recomendado algunas. ¡Me encanta el cine!

He leído hermosos textos.

He visto el anochecer, y a los pájaros refugiándose en sus árboles para descansar.

He visto la ciudad de noche. Me encanta verla alumbrada por las luches hechas por el hombre.

He visto el campo de noche, y a las constelaciones que posan sobre nuestro hogar.

He visto el Atlántico, el Pacífico, el Índico y el Mediterráneo.

He visto el mundo desde las alturas. Se siente bien poder admirar el mundo desde arriba, y sentir querer aventarse al vacío para volar como las aves del firmamento.

He visto obras de arte maravillosas, y edificios majestuosos.

He visto a mis amigos pedir la mano de sus parejas y verlos comprometerse para siempre. ¡Qué hermoso!

Pero también he visto lo feo de este mundo, lo que nadie quiere ver, lo que muchos quieren ignorar.

He visto personas llorar sin recibir consuelo.

He visto la pobreza y la desigualdad entre los más necesitados, en los más pobres de los pobres.

He visto el clasismo y racismo de mi gente.

He visto la muerte de cerca. La he tocado, me ha besado.

He visto el rechazo en mi familia.

He visto el rechazo hacia alguien por parte de quien se ama.

He visto muchas personas que no son correspondidas en el amor. Soy una de ellas.

He visto a mi madre llorar, y a mi padre sin tener a nadie quien lo comprenda.

He visto a los enfermos sufrir por la enfermedad.Soy uno de ellos.

He visto la impotencia de las personas y sus ganas de querer gritar ahogándose en el enojo.

He visto la corrupción, la impunidad, la negligencia y la injusticia.

He visto la mentira y la desilución.

He visto personas buscando respuesta divina, sin ser escuchados, sin ser atendidos. Soy una de ellas.

He visto personas destrozadas por otras, o por ellas mismas.

He visto corazones rotos. Me identifico con ellos.

En fin.He visto muchas cosas en este mundo.Muchas de ellas no las comprendo.

Nunca he visto a Dios en persona. Quisiera verlo.

Tampoco he visto a la persona con la que compartiré el resto de mis días aquí en la Tierra, con quien pudiera tener hijos. Quizá Dios no quiera ese plan para mí, o quizá ya haya visto a esa persona pero dejé pasar la oportunidad. ¡Qué idiota!

Aún no descifro el por qué los bebés se me quedan viendo cuando paso frente a ellos en la calle o me siento a un lado suyo. Me observan asombrados, me sonríen.

Pero sí he descifrado los rostros y los ojos de las personas que conviven a mi alrededor. Es un universo completo.

Solamente Dios sabe qué otras cosas más verán estos ojos. Solamente él sabe hasta cuándo dejarán de ver. Solamente él sabe cuando partiré.

Armando Cifuentes G.

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